De todas partes del país se acercaron al imponente «Madre de Ciudades» de Santiago del Estero para presenciar el último test match entre Los Pumas y Escocia. Es más, hasta muchas personas se quedaron aparentemente afuera. Y no era para menos.
Se pudo observar a muchos tucumanos, aprovechando que en los torneos del NOA no había fecha programada, que asistieron. Son los casos de jugadores y ex jugadores de Bajo Hondo (foto) que por primera vez se animaron en grupo armar el viaje para animar a los dirigidos por Cheiká. Ellos son Ramiro Chemes, Christian Kirchberger, Gabriel Reyna, Gerónimo Toscano, Víctor Heredia, Victor Skinari y Eber Iramain. Gente ligada a Aguará Guazú como Sebastián y Augusto Ávila, de Coipú que se llegó con un grupo nutrido y de La Querencia.


También se observó una gran bandera de Lawn Tennis, jugadores y dirigentes de Huirapuca compartiendo algo en el imponente fans fest instalado a las afueras del estadio, delegaciones de las infantiles de Cardenales, entre otros equipos tucumanos dispersos por las instalaciones.




Todos, sin dudas, ayudaron en el último empujón para que Los Pumas saquen adelante un partido que se les estaba presentando bastante chivo. Al final fue festejo total. Cada asistente se vuelve a su hogar empanzados de felicidad. Ni que decir de los santiagueños, que transpiran orgullo, de haber mostrado al mundo y al propio mundo del rugby (sólo se habían disputado partidos de fútbol) que cuentan con un estadio de primer nivel, como el mismo Capitán, en éste partido, Pablo Matera, señaló en la conferencia de prensa de que «no tienen nada que envidiarles a ningún estadio de Europa o Estados Unidos. Hasta la sala de prensa es hermosa», señaló.